Este 1 de octubre se conmemora el Día Internacional de las Personas Mayores, fecha establecida por la Asamblea General de las Naciones Unidas para reconocer el papel transformador que desempeñan en la construcción de sociedades resilientes y equitativas. En el Distrito Metropolitano de Quito, donde residen 262.030 personas de 65 años y más, esta conmemoración cobra especial relevancia al visibilizar tanto los aportes de este grupo de atención prioritaria como los desafíos que enfrentan en el ejercicio pleno de sus derechos.
El tema propuesto este año por Naciones Unidas es «Las personas de edad impulsan la acción local y mundial: nuestras aspiraciones, nuestro bienestar y nuestros derechos», una premisa que interpela a reconocer a las personas adultas mayores no como sujetos pasivos de cuidado, sino como agentes activos de cambio social. En Quito, 146.355 mujeres y 115.675 hombres mayores de 65 años representan una riqueza de experiencia, conocimiento y memoria colectiva que debe ser valorada y protegida. Sin embargo, los datos revelan que este grupo enfrenta múltiples vulneraciones: según la Encuesta SABE I, el 14,7% sufre negligencia y abandono, el 14,7% ha sido insultado y el 7,2% ha recibido amenazas de daño físico, siendo las mujeres las más afectadas.
Las cifras locales confirman esta realidad alarmante: entre 2021 y septiembre de 2023, las Juntas de Protección de Derechos de Mujeres y Personas Adultas Mayores del DMQ receptaron 947 casos, siendo la violencia psicológica, física, patrimonial y sexual las más frecuentes. La Defensoría Pública, por su parte, ha patrocinado 795 casos de víctimas adultas mayores desde 2020, evidenciando un incremento preocupante de mujeres adultas mayores víctimas de violencia. A esto se suma que según la ENEMDU 2023, el 51,2% de las personas mayores de 65 años trabaja en el sector informal, reflejando precariedad laboral y económica que profundiza su vulnerabilidad.
El Consejo de Protección de Derechos del DMQ alerta de la urgencia de fortalecer el Sistema de Protección Integral para garantizar que las personas adultas mayores envejezcan con dignidad. Las proyecciones del INEC estiman que para 2050 habrá 125 personas mayores de 60 años por cada 100 menores de 15 años, con una esperanza de vida que alcanzará los 85,5 años para mujeres y 79,6 años para hombres. Este cambio demográfico nos convoca a repensar nuestras políticas públicas, servicios y espacios urbanos para construir una ciudad verdaderamente amigable con el envejecimiento.
En este Día Internacional, el Consejo de Protección de Derechos hace un llamado a toda la ciudadanía a combatir los viejismos y la discriminación por edad, a denunciar cualquier forma de violencia contra personas adultas mayores y a promover espacios de participación donde sus voces sean escuchadas y valoradas. Servicios como la Unidad Patronato Municipal San José, las Juntas de Protección de Derechos y los programas del MIES están disponibles para garantizar atención y protección. Construir una ciudad que envejece con dignidad es responsabilidad de todos y todas.