Considerando que ¨la alimentación es un requisito para la supervivencia y el bienestar de la humanidad y una necesidad humana fundamental¨[1], la Asamblea General de las Naciones Unidas estableció que cada 16 de octubre se celebre el Día Internacional de la Alimentación, con la finalidad de concientizar sobre el problema alimentario y fortalecer la solidaridad en la lucha contra el hambre, la desnutrición y la pobreza. Adicionalmente esta fecha es el aniversario de la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

La alimentación es una necesidad humana y un derecho, como lo establece la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que en su artículo 25 expresa ¨Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios¨. En interpretación del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (1999): “El derecho a la alimentación adecuada se ejerce cuando todo hombre, mujer o niño, ya sea solo o en común con otros, tiene acceso físico y económico, en todo momento, a la alimentación adecuada o a medios para obtenerla”.

Hoy en día se produce el doble de los alimentos que necesitan los casi 7.700 millones de personas que habitan la Tierra, sin embargo, cerca de 3.000 millones de personas no tienen acceso a alimentos adecuados[2] por ello, los estados miembros de las Naciones Unidas se comprometieron a impulsar los ¨Objetivos de Desarrollo Sostenible¨ para poner fin a la pobreza, proteger el planeta y garantizar que todas las personas gocen de paz y prosperidad para el año 2030, uno de sus objetivos se denomina ¨Hambre Cero¨ y propone: ¨poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible¨.

La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT 2018)[3] establece que la desnutrición crónica en niñas y niños de 0 a 5 años es del 23% y el sobrepeso y obesidad en niños de 5 a 11 años llega al 35,4%; los problemas de alimentación se relacionan con situaciones de pobreza, y las principales consecuencias son problemas de la altura en relación con la edad, menor capacidad de aprendizaje y menor capacidad productiva. Ecuador es el país con el mayor índice de desnutrición crónica en Sudamérica.

Hambre y pobreza se relacionan con problemas globales como la degradación ambiental, la sequía y la pérdida de biodiversidad; a los que ahora se debe sumar el impacto por la crisis sanitaria mundial por el COVID-19 que ha revelado el limitado acceso a la alimentación de gran parte de nuestra población, y la debilidad del Estado para cumplir su responsabilidad de activar sistemas de protección para mitigar el hambre. Los cálculos realizados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) establecen que, como resultado de la pandemia, se aumentará este año un 14% de menores que sufren de desnutrición, su director Tedros Adhanom Ghebreyesus declaró “No podemos aceptar un mundo donde los ricos tengan acceso a dietas saludables mientras que los pobres se quedan atrás”[4],

El sistema alimentario comprende diferentes áreas: producción agrícola, inocuidad de los alimentos, mercados, nutrición, agua, salud, protección social, empleo decente, acceso a los recursos. Y forman de este sistema diferentes actores como: productores, consumidores, sector privado, sociedad civil y el Estado.

Los organismos internacionales hacen un llamado para que este Día sea un motivo para el reconocimiento de las y los agricultores, quienes no han sido suficientemente valorados por su trabajo para la provisión de alimentos en medio de esta pandemia.

Ciudadanas y ciudadanos, como consumidores, somo parte de este sistema alimentario, por lo que tenemos la responsabilidad de elegir el consumo de alimentos saludables, comprar productos locales y fomentar hábitos sostenibles, como evitar el uso de plásticos.

Que el Día Mundial de la Alimentación sea una alerta para fortalecer la solidaridad hacia la población más vulnerable y la preservación de nuestro planeta, en el que se haga posible el objetivo establecido de tener un mundo con hambre cero.

 [1] https://undocs.org/es/A/RES/35/70

[2] https://www.who.int/es/news/item/13-07-2020-as-more-go-hungry-and-malnutrition-persists-achieving-zero-hunger-by-2030-in-doubt-un-report-warns

[3] https://www.ecuadorencifras.gob.ec/salud-salud-reproductiva-y-nutricion/

[4] https://www.elcomercio.com/actualidad/muerte-ninos-desnutricion-pandemia-covid19.html