Las Naciones Unidas establecieron el 12 de agosto como el “Día Internacional de la Juventud” con el fin de generar conciencia del papel de la juventud como esencial en los procesos de cambio en la humanidad. La Constitución de la República del Ecuador, en su Art. 39, reconoce a las y los jóvenes como actores estratégicos para el desarrollo del país y establece que le corresponde al Estado garantizar sus derechos en: educación, salud, vivienda, recreación, deporte, tiempo libre, libertad de expresión y asociación. Establece además que el Estado fomentará su incorporación al trabajo en condiciones justas y dignas, con énfasis en la capacitación, la garantía de acceso al primer empleo y la promoción de sus habilidades de emprendimiento.

La juventud es el período de la vida donde se consolida la personalidad, se adquieren conocimientos, se afianza la seguridad personal y se establece la proyección de la realización personal. Sin embargo, se constatan graves carencias y omisiones que afectan su desarrollo integral, y limitan sus derechos. Entre los principales problemas que enfrentan las y los jóvenes están:

  • En el año 2017, según el Instituto Nacional de Evaluación Educativa se tenía una tasa neta de matrícula para Bachillerato General Unificado del 71%, con una tasa de deserción en este período del 5,3%.
  • Durante el año lectivo 2017-2018, uno de cada cinco bachilleres obtuvo un nivel de logro Insuficiente al no lograr obtener un promedio superior o igual a 7 puntos en la prueba “Ser Bachiller” para el ingreso a la educación superior; 3 de cada 10 estudiantes alcanzaron un nivel de logro satisfactorio, de ellos 2 son mujeres y 1 es hombre.
  • Según información de la Senescyt, en el segundo semestre del año 2018 un total de 205.455 personas se postularon para ingresar a la educación superior pública, pero los cupos ofertados solo llegaron a 125.068, es decir, el 51% de la demanda.
  • En el acceso a la educación superior, los grupos indígenas y afroecuatorianos mantienen menores promedios que los que se autoidentifican como mestizos/blancos, lo que evidencia el rezago en este tema de los grupos históricamente marginados.
  • La principal causa de muerte, entre jóvenes de 20 a 30 años, son: Accidentes en transporte terrestre (26,8%), homicidios (10,0%), suicidio (9,4%); enfermedades por VIH (5,6%); embarazo, parto y puerperio (3,1%). Estos datos reflejan el nivel de violencia que vivimos como sociedad en donde las y los jóvenes son sus principales víctimas.
  • En diciembre de 2019 la tasa de desempleo juvenil alcanzó el 37,6% 10 veces más alta que la tasa promedio nacional, que se ubicó en 3,8%.

Todos estos problemas se han acrecentado por la pandemia del COVID 19, que paso de convertirse de un problema sanitario a una crisis económica y social, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha establecido que “Más de uno de cada seis jóvenes ha dejado de trabajar desde el comienzo de la pandemia de Covid-19“, lo que se explicaría por las restricciones a las actividades productivas y la contracción del consumo, que afectan al turismo y el comercio que son los sectores que ocupan más a trabajadores jóvenes, adicionalmente quienes lograron salvar sus empleos han visto afectadas sus jornadas laborales por una reducción del 23%.

El director general de la OIT Guy Ryder declaró que “Si no tomamos medidas inmediatas y significativas para mejorar su situación, el legado del virus podría acompañarnos durante décadas. Si el talento y la energía de los jóvenes son marginados por falta de oportunidades o de competencias, esto ocasionará un daño al futuro de todos nosotros y hará que sea mucho más difícil reconstruir una mejor economía post-Covid”.

Cuando se informó que el virus provoca mayor mortalidad en adultos mayores y con padecimientos médicos anteriores, se dio por entendido que los jóvenes eran inmunes a contraer esta enfermedad, o que no correrían peligro,  sin embargo la Organización Mundial de la Salud, ha alertado del informe de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades estadounidenses (CDC) “sobre los contagios por coronavirus en Estados Unidos (EE. UU.), que se asegura que las personas de 20, 30 y 40 años registran un número significativo de hospitalizaciones, se revela que de 500 casos positivos de coronavirus hospitalizados, un 20 por ciento eran personas entre 20 y 44 años, mientras que un 18 por ciento eran adultos entre 45 a 54 años.

Por este motivo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, hizo un llamado a las y los jóvenes para recordarles que “no son invencibles” ante la actual pandemia de coronavirus e instó a actuar responsablemente, incluso si no se enferman, pues las decisiones sobre “dónde ir podrían ser cuestión de vida y muerte para alguien más”.

Pero esta Emergencia Sanitaria ha generado sobre todo un impacto en las y los jóvenes como sus principales víctimas. Según la ENEMDU- Telefónica del INEC de Junio 2020, de cada 100 trabajadores más del 80% no tiene un empleo adecuado, y la tasa de desempleo se disparó del 3,8% de diciembre 2019 al 13,3%; lo que se evidencia en la disminución de empleos, la precarización laboral y la restricción de la economía que limita recursos para realizar emprendimientos productivos juveniles.

Actualmente la mayor cantidad de la población en nuestro país es joven, pero según las proyecciones del INEC, en el año 2030, Ecuador empezará a tener una población que envejece, lo que determinará el final del “bono demográfico” por lo que se debe aprovechar en este tiempo las capacidades de este grupo poblacional para no comprometer el futuro del país.

Si consideramos a las y los jóvenes como actores estratégicos para el desarrollo del Ecuador, es el momento de enfocar las políticas públicas para precautelar el empleo y la seguridad social de este grupo, empezando por fomentar su empoderamiento y respetar sus voces, que desde la diversidad son las que pueden diseñar e implementar los cambios que nuestro País necesita.

Bibliografía:

  • Instituto Nacional de Estadísticas y Censos.2018. Tecnologías de la Información y Comunicación Encuesta Multipropósito – TIC 2018.
  • Instituto Nacional de Estadísticas y Censos. 2020. ENEMDU TELEFÓNICA Mayo/Junio 2020
  • Instituto Nacional de Evaluación Educativa 2019. La Educación en el Ecuador: Logros Alcanzados y Nuevos Desafíos. Resultados Educativos 2017 – 2018
  • Organización Internacional del Trabajo. 2020. Observatorio de la OIT: El COVID‑19 y el mundo del trabajo. Cuarta edición Estimaciones actualizadas y análisis