EL AGUA ES VIDA, DEBEMOS PROTEGERLA

DÍA INTERNACIONAL DEL AGUA

Olvidamos que el ciclo del agua y el de la vida son uno

Jacques Cousteau

En el año 2010 Naciones Unidas reconoció que “el derecho al agua potable y el saneamiento es un derecho humano esencial para el pleno disfrute de la vida y de todos los derechos humanos” (NNUU, 2019), por lo tanto, si es un derecho humano significa que debe ser gozado por todas las personas sin discriminación de ninguna clase.

Sin embargo, a nivel mundial la situación respecto al agua es alarmante, según Naciones Unidas (2019):

  • Existen aproximadamente 2,1 millones de personas que viven sin agua potable en sus hogares
  • Mas de 700 niños/as menores de 5 años mueren diariamente por diarreas por el uso de aguas insalubres
  • 700 millones de personas en el mundo podrían verse forzadas a desplazarse debido a la escasez de agua de aquí a 2030
  • Alrededor de 4000 millones de personas padecen escasez grave de agua durante al menos un mes al año.

En el Distrito Metropolitano de Quito aún tenemos la posibilidad de contar con agua segura para el uso personal y comercial, de ahí la importancia de generar conciencia en la ciudadanía para cuidar y racionalizar el uso de este recurso. Según los indicadores de la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (EPMAPS, Sep, 2018), se conoce que:

  • El agua de calidad en el DMQ llega al 99,7% de la población.
  • El alcantarillado en el DMQ es del 93,66%, siendo en la zona rural del 85,92% y en la zona urbana de 96,91%
  • Se registra un consumo de agua de 0,72 metros cúbicos, tanto en el consumo industrial como comercial, en tanto que el consumo doméstico es de 0,46 metro cúbicos

A nivel internacional la consigna de este año es “NO DEJAR A NADIE ATRÁS “, esto en el marco del Objetivo de Desarrollo Sostenible No. 6, el cual establece la garantía a la disponibilidad y gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos hasta el año 2030. Este objetivo es una de las medidas que se establece, a nivel mundial, para combatir la pobreza y proteger el planeta con el fin máximo de garantizar el goce de todos los derechos humanos y de la naturaleza.

El reto en el Distrito Metropolitano de Quito está orientado en dos ejes: el primero, lograr el acceso de agua segura para el 100% de su población, con equidad en las áreas urbana y rural; el segundo, exige un proceso de sensibilización para concienciar a la ciudadanía sobre el uso responsable del agua y la importancia de cuidarla, para el disfrute y goce de esta generación y de las futuras.

En este contexto, es importante que la ciudadanía tome conciencia de la importancia de este recurso y que se comprometa a cuidar y hacer un uso responsable del agua, proteger los ecosistemas que se relacionan con ella: bosques, montañas, páramos y ríos. De igual forma, es urgente que las instituciones competentes potencien la generación de sistemas que permitan aprovechar y reutilizar las aguas residuales así como los recursos hídricos, de manera responsable.

Este es un desafío y responsabilidad de todas y todos, para no olvidar que el ciclo del agua y el de la vida son uno solo y, por lo tanto, nadie puede ser discriminado ni dejado atrás para acceder a agua segura durante toda su vida.